Comunicación a la Comisión Coordinadora del XII EFLAC
Conscientes de la importancia de hacer aportes para avanzar en el debate generado a propósito de la decisión de escoger el Hotel Tequendama como sede de nuestro encuentro feminista, queremos expresar las siguientes consideraciones:
- Este debate no debería ser visto como un intento de boicotear u obstaculizar el proceso de preparación del XII EFLAC sino como un paso más, de los necesarios que llevarán a realizar un Encuentro que quiere reunir a distintas expresiones feministas de la región.
- En ese sentido, esperamos que el comité coordinador del XII EFLAC en Colombia, tome estas reflexiones como aporte para repensar y reorientar decisiones que, aunque tomadas de acuerdo a las reglas que hemos ayudado a construir durante el proceso, no pueden erigirse en verdades absolutas o inamovibles si ellas son cuestionadas o controvertidas por distintas voces feministas de Latinoamérica.
- Las integrantes de Desacato Feminista, hemos sido parte de los espacios de diálogo y de las comisiones de preparación del EFLAC, y hemos insistido en asumirlo como un espacio del que todas somos parte. Por ello, nos sentimos comprometidas y responsables por lograr un EFLAC coherente y responsable con postulados éticos básicos del feminismo.
- Queremos expresar a las dos corrientes más visibles del feminismo de la región: las autónomas y las llamadas institucionales, que nuestra postura es independiente porque aunque a veces no lo vean, el feminismo en la región es mucho más diverso y plural y no tiene dos orillas sino múltiples. Desacato Feminista es una de esas expresiones comprometidas con el feminismo, otros mundos posibles no capitalistas ni patriarcales, el pacifismo y la libertad sexual.
- Sobre el cuestionamiento al lugar de realización del EFLAC, el Hotel Tequendama, queremos ofrecer argumentos para que se reconsidere esta decisión. El primero, tiene que ver con que “el Hotel Tequendama es una sociedad anónima de economía mixta que contribuye con sus utilidades al pago de las asignaciones del personal en retiro de las Fuerzas Militares”. No podemos escapar a la innegable relación de las fuerzas armadas de Colombia con la violación de derechos humanos, entre lo que se cuenta la violencia sexual contra mujeres y niñas. Sabemos que a veces las angustias, las presiones, y el deseo de tener un espacio adecuado para el evento nos hacen olvidar la historia del país, pero el Comité Coordinador debe reconocer que estamos en una coyuntura crítica en la que se ha conocido una nueva denuncia de casos de violencia sexual contra mujeres, en el marco del conflicto armado, en la cual se afirma que el 83% de dichas agresiones fueron realizadas por miembros de la fuerza pública. A ello se une el asesinato de Ana Fabricia Córdoba en el que por acción o por omisión las fuerzas armadas tienen una responsabilidad directa.
- En este momento en que el tema ha retomado visibilidad nos preguntamos si es sostenible defender la realización del XII EFLAC en el Hotel Tequendama. Nosotras nos hemos hecho la pregunta y respondimos negativamente. No creemos que se pueda hacer compatible un EFLAC en condiciones logísticas y operativas óptimas y al mismo tiempo entregar dinero a un actor del conflicto que ataca de manera cotidiana a las mujeres como arma de intimidación, terror y guerra.
- Sabemos del esfuerzo y compromiso de las comisionadas para dinamizar el proceso de preparar un encuentro de la magnitud y trascendencia de un EFLAC. Valoramos el trabajo voluntario que todas hemos puesto de diferentes maneras, y la confianza que hemos depositado en todas para respaldar las decisiones que sean necesarias tomar en el camino recorrido hasta ahora, pero también apelamos a la posibilidad de expresar la diferencia, el disenso y que se tomen en cuenta argumentos éticos y políticos para decidir lo operativo y logístico. No sabemos si es tarde o no para cambiar el lugar, pero pedimos que se considere por ejemplo, hacer uso de varios hoteles para el hospedaje y concentrar las actividades en un lugar público como una universidad, que aunque a todas luces es menos cómodo, y exige mayores sacrificios a las participantes, tendría mayor acogida y mayores posibilidades que la actual opción.
Nos gustaría conocer sus análisis y decisiones mediante una nueva Boletina que nos permita avanzar en el diálogo y en la organización del que queremos siga siendo nuestro espacio de encuentro feminista,
Alejandra Ortiz Valencia
Angélica Bernal Olarte
Celenis Rodríguez Moreno
Diana Gómez Correal
Me parece oportuna su carta dirigida a la comisión organizadora del XII EFLAC y saludo que otras voces feministas se pronuncien contra una decisión desafortunada que debe ser remediada. Me alegra además que esta vez la voz no viene de "afuera" sino que resuena desde "adentro": ustedes han sido parte de la CO, y su disconformidad con la decisión implica que la misma no ha sido tomada en unanimidad y que hay disidencias internas que también deben ser tomadas en cuenta. Hasta ahora el silencio parecería conspirar a favor de la idea de una comisión organizadora unánime y por ello, firme, en sus decisiones. Y vale decir que esta aparente unanimidad ha servido para invalidar a quienes desde "afuera" hemos cuestionado la decisión de la sede del encuentro, bajo el argumento de que sólo la impertinencia y el "deseo de hacer daño" es lo que guía nuestro pedido. Desmantelar esta idea mostrando que aun desde adentro se puede cuestionar esta decisión, es un aporte importante que redirecciona el debate a lo que verdaderamente interesa: la necesidad de, en lo inmediato, cambiar la sede de este encuentro, y más allá de esta coyuntura, la necesidad de volver otra vez a una reflexión respecto de los fines éticos de la propuesta feminista por sobre la lógica pragmática.
ResponderEliminarPor último sólo señalarles, a propósito de la consideración No. 4, que no cometan el mismo error que están denunciando: el error de pensar que el feminismo latinoamericano se agota en las posturas autonomía-institucionalidad se asienta en la idea de que hay algo como dos posiciones antagónicas fijas, cerradas en sí mismas y sin fisuras múltiples. En efecto, las corrientes autónomas e institucionales del feminismo en América Latina son muchas y hay diferencias importantes entre ellas, para empezar, por ejemplo, la autonomía desde donde me sitúo no cree que el feminismo de la región se cierre en este antagonismo y asume un análisis mucho más complejo de la política feminista contemporánea reconociendo la multiplicidad de actoras, los precarios posicionamientos y la necesidad de un diálogo con los diferentes feminismos (hegemónicos y contrahegemónicos).
un abrazo feminista,
Yuderkys Espinosa, GLEFAS